El líder, ¿nace o se hace? ¿En qué momento puedo ser un líder? Y retomando todas estas preguntas o inquietudes, primero es que todos nacemos líderes, se decide si se ejerce o no porque nadie nació con una etiqueta de que es o no líder. La siguiente pregunta sería ¿estoy dispuesto a ser líder?
La responsabilidad esta de tu lado
Lo ideal es poder tomar acción de conciencia en relación a temas como estos a temprana edad.
En muchos niños y niñas o jóvenes, se ven ciertas capacidades o acciones de liderazgo, ¿Qué hacen los padres mayoría de veces? Pues matan esa iniciativa, en vez de canalizar esa habilidad natural que el joven está teniendo como una forma de expresar. ¿Cómo se puede lograr esto sin pasar de la raya? Poniendo límites permitiendo al joven expresarse, porque lo ideal es desarrollar las habilidades de liderazgo desde temprana edad.
Luego viene otra etapa para definir que se puede reconsiderar, que actitud o que asunción de liderazgo se va a tomar ya siendo adulto. Por ejemplo, al llegar a los 18 años de edad, porque ya se conlleva nuevas responsabilidades y de ahí, la asunción de un liderazgo que ya le pertenece al joven-adulto.
Hay otra opción que es ‘la tomamos o la tomamos’, siendo ya un hombre, mujer madur@, adult@, laboralmente activa, con planes e independiente, ya se tiene que asumir un liderazgo por condición propia de la etapa de vida, y esa responsabilidad no se puede obviar.
“La vida adulta te exige ser responsable” –César Cordero, Dale Carnegie.
Principios para orientar el liderazgo de manera efectiva
1-Comenzar a identificar las propias fortalezas.
Muchas veces las personas son muy firmes atacando lo que no se tiene o no se tuvo, y solo se cuenta con eso, con las limitaciones, en vez de identificar lo positivo que tenemos.
Te recomendamos a que hagas una lista, no de todas las cosas que tienes, sino de esas cualidades de las personas que admiras, no importa que sea larga. Luego que la hagas, identifica cuáles de esas cualidades tienes tú mismo y te darás cuenta de que la respuesta a este ejercicio es que las tienes todas. Puede que en el primer intento lo pongas en duda. Debes comenzar a pensar que tienes disposición de pensar realistamente que tienes todas esas pero no la estas desarrollando. Es en ese momento que identificas que tanto estas usando una de ellas.
2- Construir confianza.
Hay personas que quieren influir en otras sin haberse ganado su confianza.
¿Cuál es elemento clave para generar confianza y que nos permite lograrlo? Nada más y nada menos que la comunicación. Si no te comunicas, no puedes construir confianza. Esto es abrir el corazón y poder dejar ver a los demás quien se es e identificarse y buscar con las emociones del otro quien es o que es como persona. Recuerda que en algún grado, las personas que están a tu alrededor son mejor que tú y en el mismo aprendes de ellas. Se trata de comunicación humilde, desde el sentido de inteligencia social y con principios de relaciones humanas que acercan.
No se trata solamente de comunicar desde la perspectiva del decir, también es desde el hacer, de conectar emocionalmente con otras personas.
3-El liderazgo comienza con un sentido de motivación interna.
Es decir, cuándo, cómo y dónde ser un líder. ¿Cuándo? Ahora. ¿Dónde? En donde quiera que estés. ¿De qué manera? Simplemente tomando la decisión de serlo, de una manera responsable y orientada a como se puede ser la mejor versión de ti mismo.
4-No existe nada más efectivo en un líder que demostrar interés genuino en los demás.
El liderazgo no se trata de tener seguidores, sino tener liderados debajo y alrededor tuyo. Ese el verdadero liderazgo, personas que ayudas a que sean mejor, un líder que esté dispuesto al relevo. Todo basado en un liderazgo de influencia.
