Despedimos la semana, enfocando nuestra intención en aprovechar el presente y mantenernos viviendo constantemente el hoy. Esto lo hacemos con la frase que nos dice: «Cada día, cada segundo, dejamos una huella de lo que somos. Que nuestras acciones reflejen lo mejor de nosotros». El pasado ya no puede ser cambiado y el futuro es incierto, pero el presente es tangible y real. Es en el presente donde se experimentan las emociones, donde se crean los recuerdos y se construyen las relaciones que realmente importante.
Reflexionamos acerca de «Cómo practicar el gaman, el ‘flow’ japonés para vivir el momento sin ansiedad». Este inspirador y sencillo concepto japonés puede costar de aplicar si no se practica con intención. Sin embargo, es clave para disfrutar del presente abierto a las oportunidades. El gaman es un concepto japonés que promueve la paciencia, la perseverancia y el autocontrol frente a las dificultades, permitiendo a las personas vivir el momento presente sin ansiedad. Se trata de aceptar las circunstancias tal como son, enfocándose en la resistencia mental y emocional para sobrellevar situaciones adversas.