“Cuando se corrige y no se hace con amor se crea un dolor o daño por esa acción sin ternura o amor. Nadie ama a lo que teme. El ser humano no es malo en su esencia, es con la convivencia humana que va aprendiendo lo que no es bueno. Los niños reaccionan bien cuando se les plantea una disciplina con amor. La autoridad represiva de los padres arruina la energía vital de los hijos. Educar no es fácil, se da desde el amor. Cuando amamos a alguien nos realizamos como persona. El que no está preparado para amar, que no eduque”.
