Fénix Pérez nos recuerda una herramienta de uso de un principio vital: el estado de benevolencia. Ese estado que incorporas en tu cuerpo y te llevan a la receptividad, de amor incondicional, vinculado a todo lo que es el mundo espiritual. Un pensamiento benevolente cambia la energía de tu cuerpo, cambia el tipo de pensamiento que vas a seguir teniendo.