Isabella Paz nos da esas recomendaciones para guiarnos a ser buenos padres, buenas madres. Trae datos que demuestran biológicamente y neurológicamente cómo las decisiones como adultos puede afectar a los niños, tomando en cuenta que los primeros cinco años de vida son los más sensibles, es decir traer esas situaciones “no resueltos” al vivir de los hijos.