“La importancia recae porque la familia tiene un proyecto y en ese proyecto hay valores. Un niño pasa mucho tiempo en la escuela en donde hay proyectos y valores. Tiene que darse esa relación para que sea eficaz la familia y en la escuela. Que se sepa establecer, esa relación tiene que darse porque el producto de la familia y el producto de la escuela es el mismo. Es decir, formadora de personas. Es decir, que el papel de la familia y el de la escuela van de la mano, no se pueden dar sin el uno con el otro. Es importante que la familia sea sólida y consistente. Es primordial enseñar a amar, respetar y a valorar la vida para que sean personas de bien. Hay que poner atención a cuatro campos: humano, psicológico, pedagógico y el espiritual, para poder formar de manera integral a los hijos”.
